En el sector oleaginoso, especialmente para pequeñas y medianas fábricas de aceite, elegir entre prensado en frío o en caliente no es solo una decisión técnica — es una estrategia de rentabilidad. ¿Sabías que con el método correcto puedes aumentar tu margen bruto hasta un 15% sin invertir en nuevos equipos?
Ejemplo real: Una planta en Argentina que cambió de prensado en caliente a en frío reportó un aumento del 12% en el valor del producto final gracias a la mejor calidad nutricional y la posibilidad de comercializarlo como "aceite de girasol orgánico".
| Parámetro | Prensa en frío | Prensa en caliente |
|---|---|---|
| Rendimiento (% de aceite extraído) | 32–35% | 38–42% |
| Retención de vitamina E | >90% | ~65% |
| Estabilidad del color | Más claro, menos oxidación | Más amarillo, mayor riesgo de rancidez |
| Costo operativo por tonelada | +15–20% | -10–15% |
Los datos muestran claramente que si tu objetivo es maximizar el volumen de producción, la prensa en caliente ofrece ventajas inmediatas. Pero si estás posicionando tu producto en mercados premium (como Europa o Japón), donde los consumidores pagan más por calidad natural, el prensado en frío puede ser tu ventaja competitiva.
La humedad inicial del grano (ideal: 6–8%) y el grado de descascarillado afectan directamente la eficiencia del proceso. Un material con alto contenido de agua requiere más energía térmica, lo que reduce la viabilidad del prensado en frío. Por otro lado, semillas bien deshidratadas permiten mantener temperaturas bajas durante la extracción, preservando nutrientes y evitando pérdidas de sabor.
Además, la configuración de la línea de producción debe adaptarse: sistemas híbridos (prensado en frío + filtrado avanzado) pueden optimizar tanto la calidad como el rendimiento. Esto es especialmente útil si planeas vender tanto a distribuidores locales como a exportadores B2B.
Muchos fabricantes asumen que “más calor = más aceite”. Sin embargo, estudios recientes demuestran que temperaturas superiores a 65°C generan compuestos indeseables como aldehídos y ácidos grasos trans, reduciendo la vida útil del producto y limitando su acceso a mercados regulados (como la UE).
Evita este error: utiliza sensores de temperatura en tiempo real y ajusta la velocidad de prensado según la humedad del material. También considera integrar tecnología de prensado de doble etapa — primero en frío para obtener el aceite de alta calidad, luego en caliente para recuperar el residuo.
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